¿Os habéis sentido indispuestos después de una comida o cena en un restaurante? ¿En tu familia os habéis sentido enfermos tras consumir todos los mismos alimentos que habíais adquirido en el supermercado o vuestra tienda de alimentación?.
Si tras una comida resultas intoxicado como consecuencia de comer los alimentos, tienes derecho a reclamar.
No es raro que en verano sobre todo se produzcan muchos más casos de intoxicación alimentaria, con gran frecuencia porque comemos muchas más veces fuera de casa y la elevada temperatura hace que las bacterias se reproduzcan sin problema a 37º. Si hay restos orgánicos y humedad, las posibilidades de que se reproduzcan los gérmenes aumentan considerablemente. Además, las bacterias se dividen rápidamente y se reproducen alcanzando un número lo suficientemente elevado para causar daños en la persona que lo ingiere.
Puede ocurrirle a cualquiera y muchas veces los síntomas no se presentan automáticamente.
Los síntomas de una intoxicación alimentaria pueden ir desde;
- Vómitos
- Diarrea
- Fiebre
- Náuseas
- Dolor abdominal
- Pérdida del apetito
- Debilidad y fatiga
En España, los alimentos que más intoxicaciones provocan son el huevo (23%), pescados (9%), mariscos (6%), vegetales (6%) y pollo (5%). Las tortillas y las salsas a base de huevo son un gran peligro si no se manipulan y conservan adecuadamente ya que podemos intoxicarnos con salmonelosis, una bacteria que se encuentra en la cáscara del huevo. Además, con la moda de comidas internacionales como el sushi, tenemos que tener especial cuidado con el pescado por el riesgo de coger anisakis. Realmente, el pescado debería congelarse o cocinarse a una temperatura superior a 60º. Si optamos por congelarlo, 24 horas serían suficientes si alcanzase una temperatura de -20º, pero la mayoría de los frigoríficos no alcanza esa temperatura, por lo que debería estar durante 5 días. El anisakis puede provocar desde dolor de estómago, vómitos o diarreas hasta alergia. corremos el riesgo de contraer anisakis.
En esta época estival, parece que proliferan casos de intoxicación alimentaria debido a la proliferación de bacterias por las altas temperaturas aunque hay casos tristemente figurados, estos suelen ser la excepción. En el foco informativo nos encontramos con el contagio de listeriosis tras el consumo de carne mechada infectada con la bacteria de la listeria. De creer que estamos afectados por una intoxicación alimentaria si padecemos los síntomas que anteriormente hemos descrito.
Lo primero que tenemos que hacer una vez que se presenten los síntomas es acudir cuanto antes al médico para que nos certifiquen que la ingesta de alimentos ha provocado la intoxicación.
Una vez confirmado, es importante que pidas un informe que nos servirá para pedir responsabilidades en el restaurante, supermercados, tiendas de alimentación…. Llegados a este punto es muy importante que hayas conservado el ticket de la comida, muchas veces solemos dejarlo en el restaurante o perderlo, pero es la prueba infalible de que hemos comido en el lugar y de los alimentos que nos han provocado la intoxicación.
Ya en nuestro poder el informe médico de urgencias, la factura del restaurante o tienda de alimentación y tal vez otras facturas como la del traslado al hospital tenemos a una disposición diferentes vías para reclamar a un restaurante por una parte tenemos la oficina municipal de consumo (OMIC) o de la comunidad autónoma. Esta oficina puede instar a un arbitraje de consumo para llegar a un acuerdo o puede empezar un proceso de mediación. Estos dos procesos son voluntarios, tenemos que tener en cuenta que el responsable del restaurante no tiene la obligación de someterse a ello. Pero lo que sí pueden producir estas vías es el inicio de una inspección que puede derivar en sanción para el dueño del local. No se podrá acudir al arbitraje si se llegase al extremo en el que pueda incurrir un delito contra la salud pública. El Código Penal en el apartado delitos contra la salud pública, habla de adulteración de productos alimenticios susceptibles de causar daños a la salud de las personas y establece penas de prisión de hasta seis años.
La segunda forma es a través de un buen abogado como Ana Sarabia para pedir responsabilidades. Para realizar este trámite debemos interponer una demanda por daños y perjuicios, además de aportar toda la documentación de la que hablábamos en el párrafo anterior. Puedes realizar todos estos trámites fácilmente desde tu ordenador o móvil en LexDigo